Misión y Objetivos

“Te recomiendo que reavives el don de Dios que has recibido”(2 Tim 1,6)

En el marco de la celebración de los 450 años de la Iglesia de Santiago, el 23 de julio de 2011, El Sr. Arzobispo de Santiago, Monseñor Ricardo Ezzati, anunció la creación de la Vicaría para el Clero, encomendándole el acompañamiento, asistencia y formación permanentemente de los presbíteros y diáconos permanentes, ayudándoles a nutrirse constantemente de las fuentes del propio ministerio. (1)

El itinerario formativo del ministerio se configura y percibe del contacto frecuente con la Palabra de Dios, el diálogo diario con el Señor en la oración, la celebración siempre renovadora de los sacramentos, la participación activa en la vida eclesial de la Arquidiócesis y la actualización teológica y pastoral.

La Vicaría para el Clero responde a estas necesidades, como también a la exigencia de los tiempos actuales de una permanente formación y renovación, puesto que no basta la formación inicial recibida en el Seminario o la Escuela para el Diaconado.

Desde esta perspectiva, una Vicaría para el Clero tiene sentido en la medida en que atiende y está al servicio de la vida y el ministerio del clero, entendiendo la atención y servicio como el conjunto de acciones, iniciativas y programas coordinados orgánicamente que permiten establecer una verdadera pastoral, con un sistema de formación permanente, tanto de los presbíteros como de los diáconos permanentes -y la esposas de los que son casados-, en la misma línea de las orientaciones formativas entregadas antes de recibir el don del sacramento del Orden.


MISIÓN

Estar al servicio de la vida y el ministerio del clero, tanto de los presbíteros como de los diáconos permanentes, a través de un sistema orgánico y sistemático de formación humana, espiritual, intelectual y pastoral, en sintonía con las orientaciones y acentuaciones pastorales del Arzobispado de Santiago y de acuerdo a la realidad cultural y religiosa actual.


OBJETIVOS

Objetivo general

Implementar una pastoral sacerdotal y diaconal a través de un plan de formación permanente, como expresión de la cercanía y solicitud del Arzobispo de Santiago por cada uno de los miembros del clero incardinados en la Arquidiócesis de Santiago, así como también de aquellos que colaboran pastoralmente en ella con anuencia de su Obispo respectivo.

Objetivos específicos
  1. Favorecer el desarrollo de la dimensión humana promoviendo el bienestar material, físico y psicológico del Clero.
  2. Contribuir al enriquecimiento de la vida espiritual para estimular el encuentro con Dios a través de la oración y el discernimiento permanente de su voluntad en todos los ámbitos de la vida.
  3. Actualizar permanentemente la formación teológica y pastoral favoreciendo un ejercicio pertinente y eficaz del ministerio que tenga en cuenta la realidad sociocultural y las orientaciones y necesidades de la Iglesia.
  4. Colaborar con el mejoramiento de la acción pastoral, entregando las herramientas necesarias y contribuyendo al desarrollo de una Iglesia que vive la comunión y la participación.
  5. Fortalecer la vida matrimonial, de los diáconos permanentes, profundizando en la espiritualidad del sacramento del matrimonio y sus implicancias y entregando herramientas para el desarrollo de un amor esponsal maduro.

DEFINICIÓN DE COMPETENCIAS ENTRE LA VICARÍA PARA EL CLERO Y OTROS ORGANISMOS ARQUIDIOCESANOS

Para el logro de sus objetivos, la Vicaría para el Clero desarrolla su servicio en coordinación con otras instancias de la Iglesia Diocesana, especialmente con la Vicaría de Pastoral, los Vicarios Episcopales zonales y ambientales y la Fundación Santo Cura de Ars.

Para evitar interferencias entre las competencias de las respectivas Vicarías del Arzobispado de Santiago, se ha definido el siguiente criterio de acción:

Le corresponde a la Vicaría para el Clero:

  1. Toda acción institucional de la Iglesia de Santiago en beneficio de la vida y ministerio de los sacerdotes y diáconos permanentes, en el ámbito de la formación permanente.
  2. Todo lo referente a los presbíteros sin encargo pastoral.

Le corresponde al respectivo Vicario Zonal o Ambiental:

  1. Todo lo que está referido a la persona de un clérigo en particular con encargo pastoral. Lo contrario ocurrirá de común acuerdo entre ambos Vicarios.

 

(1) Decreto de fundación de la Vicaría, 23 de septiembre de 2011.